LA CUARTA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL Y LA ESCUELA MEXICANA (Tercera de tres partes)

Marzo 15, 2019

GABRIEL ROMERO
El pasado viernes 1 de marzo, en el marco de los trabajos del Consejo Técnico Escolar, de los aproximadamente 226 mil planteles de educación básica de todo el país, el Secretario de Educación Pública, Mtro. Esteban Moctezuma Barragán, a través de un video, perfiló los rasgos de la nueva escuela mexicana.
Las maestras y maestros frente a grupo, aplaudieron dos temas sustantivos en la operación y gobernabilidad del sistema: la evaluación docente y la descarga administrativa.
Sobre la evaluación docente precisó que ésta no estará vinculada a la permanencia y que todos aquellos docentes que fueron despedidos por no presentarse a ella, serán reinstalados.
En el caso de la descarga administrativa para docentes y autoridades, de manera muy didáctica mostró las carpetas que se deben integrar para reportar actividades escolares y procesos técnicos que no tienen un impacto directo en el aprendizaje de los alumnos.
En el video, el Secretario reiteró el reconocimiento al trabajador de la educación y la importancia de su participación para el logro de competencias y aprendizajes clave en los alumnos.
El siguiente paso es conocer el tipo de escuela y los mexicanos que se quieren formar en un mundo cambiante y que demanda ciudadanos capaces de incorporarse a un mercado laborar dominado por la cuarta revolución industrial.
Por lo tanto, la pregunta inicial es ¿cuál es el perfil de egreso que se busca al concluir la educación básica? Definiendo esto aparecen los siguientes cuestionamientos: ¿qué componentes curriculares se requieren?, ¿qué mapa curricular es el apropiado y la pertinencia de los contenidos?, ¿cuál es la carga horaria oportuna?, ¿cómo identificar y determinar las necesidades de capacitación y el desarrollo profesional docente?, ¿qué tipo de materiales educativos se deben implementar?, etc.
Si queremos una verdadera trasformación del modelo educativo, éste es el debate técnico pedagógico con el que debemos iniciar.
Hay un tema de fondo sobre el cual los docentes tienen que opinar y proponer, se refiere a los componentes curriculares del actual modelo educativo, deberán analizar y determinar si están articulados los campos de formación académica, las áreas de desarrollo y los ámbitos de autonomía, si los contenidos, es decir, las competencias, los aprendizajes y las situaciones didácticas, son pertinentes y posibles en el contexto áulico y escolar.
En lo referente al ámbito de la operación y la responsabilidad del sistema educativo se identifican algunos saldos y retos.
En cuanto a los saldos, podemos señalar la cobertura, principalmente en preescolar, de un número importante de entidades del país, la eficiencia terminal y la concreción del trayecto formativo de 15 años.
En lo concerniente a los retos: la infraestructura inclusiva para atender alumnas y alumnos con necesidades educativas especiales, el rescate y la cobertura de plataformas interactivas que apoyen el aprendizaje y promover el liderazgo de directores y supervisores con una visión pedagógica del nuevo modelo.
El escenario es oportuno. Es el momento de construir las bases de una nueva arquitectura del sistema educativo en nuestro país, la república de todos.

Gabriel Romero